El mudo sufre...

NUESTRO FÚTBOL

Si hay un pueblo emocional ése es El Salvador, en aquel memorable partido de nuestra selección en el Cuscatlán lo demuestra, perdíamos por cero a uno contra Panamá y necesitábamos de tres goles para salir de ésa incomoda situación, hubo un héroe Cheyo Quintanilla, ese muchacho nos regaló una noche inspirada y se convirtió en el más admirado de grandes y chicos, no sólo anotó dos de los tres goles necesarios sino que se conquistó el tercero y logramos salir adelante, teníamos a todo un pueblo que se enamoró por aquella hazaña; ahora las cosas han cambiado, iniciamos otra etapa mundialista, vamos de visitantes a Costa Rica y jugábamos ya otra instancia clasificatoria, y de nuevo se dan otro momento para que al menos anotásemos un gol, y de nuevo un penal a favor de El Salvador el elegido para cobrarlo Cheyo, y ¿qué pasó?, ésta vez el héroe se convirtió en villano, y todo el país ahora habla mal de aquel mismo que nos dio la oportunidad de estar ahí, el fútbol es así, no siempre se tienen los nervios bien puestos, no siempre se consiguen los resultados, estamos hablando de seres humanos no de máquinas exactas, tienen el factor humano que le abre la posibilidad de errar y de equivocarse, pero no el salvadoreño ahora quiere comerse vivo a Cheyo, no es que lo defienda sino mas bien les recuerdo que hasta las grandes estrellas  mundiales fallan, hay que entender que el resultado no fue del todo malísimo, Costa Rica no logró la gran vitoreada goleada, y tenemos mucho camino en las eliminatorias.

Ahora los grandes conocedores del fútbol nacional empezarán a hablar al estilo Nostra Damus, que ellos lo veían venir, que ellos lo sabían, que gran putas, nadie puede prevenir nada, esto fue un simple desliz de la selecta, esos muchachos aunque hayan jugado mal o de forma errática se merecen el respeto, siguen con vida sólo tenemos un gol en contra y nada más, perdimos tres puntos y ahora hay que ver lo que viene en el camino, si nos dedicamos a ser crueles vaya usted mismo y juegue por ellos a ver si le es tan fácil como usted mismo lo dice que es, a veces la carga de la camiseta sale demasiada pesada, nuestro fútbol es así, siempre tirando y jalando, siempre en el eterno hoyo no porque quiera estar así sino porque lo hacen permanecer así, todos amamos a la azul y blanco de eso no hay duda, al menos envíemeles energía buena y buena voluntad para que levanten ése ánimo que ha de estar por el suelo, perder duele pero sólo hemos comenzado el camino, en lugar de criticar seamos honestos, démosles el ánimo que se merecen, el fútbol es así ayer ganamos ahora perdimos y no siempre salen las cosas como quisiéramos.

Ezequiel Méndez

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