No quiero
ser pesimista, pero la gran mayoría de personas que vivimos en el extranjero
pero seguimos teniendo contacto con la amada patria percibimos que nuestro
terruño se ha quedado sin ideas…sus políticos se han quedado dando vueltas como
el viejo tocadiscos de vinilo que no tenía finalización automática, las ofertas
electorales actuales TODAS dejan mucho que desear, desde fórmulas ya
desgastadas del pasado: apelar al miedo, apelar al odio social o promoverse
como el mesías ya no tienen el valor que en el pasado alguna vez tuvieron, hoy
las realidades son otras, hace tres años escribía que el país caía ante la
posibilidad de no volver a levantarse si los que venían no hacían nada por
realmente CAMBIAR las estructuras pétreas y hasta desgastadas de una de las
sociedades más polarizadas, violentas y poco amistosas del planeta.
El
Salvador hoy ha caído en manos de unos pocos (como siempre) antes eran la
poderosa clase económica dominante ahora lo hacen los del otro extremo la lacra
llamada pandillas o maras, quienes desde las cárceles siguen matando,
extorsionando y poniendo en una situación deplorable a uno de los pueblos más
trabajadores y dignos del mundo, como siempre esa atomización de sectores
poderosos unos con dinero otros con armas por igual hacen lo mismo: “destruyen,
secuestran y mantienen en zozobra a todo el pueblo” antes era la ausencia de
derechos que mantuvieran una democracia ahora tenemos democracia pero no
tenemos derecho porque los delincuentes son protegidos por los infames “derechos
humanos” y seguimos de mal en peor, El Salvador sin ideas, es lo que más me
preocupa, no hay de donde sacar adelante al proyecto que como nación debemos
tener, hemos caído en los niveles de consumismo mediático más polarizado de
todos los tiempos: Una izquierda con dinero (sueño que finalmente logró) y una
derecha obtusa y sin ofrecer nada más que lo mismo miedo y mercadearse como los
salvadores del mundo… y una tercera que nace de la misma derecha pero más
virulenta que tampoco nos ofrece nada nuevo, es obvio que tendremos un nuevo
gobierno el año entrante pero la pregunta es más profunda… ¿Tenemos algo nuevo
por venir?
El
Salvador ahora es peor que hace 20 años recién salidos de la guerra el pueblo
tenía la ilusión de construir una nueva nación y que las lecciones que la
guerra nos dio serían asumidas y convertidas en algo nuevo y eso sería las
bases de una nueva sociedad… ¡Pero No! La derecha vendió al país y lo saqueó y
la izquierda también lo hizo a su manera tenemos una nueva aristocracia “popular”
que cantan las casas de cartón mientras manejan sus carros últimos modelos, y
los ricos de siempre que desean con hambre el poder no porque les interese el
pueblo sino porque como clase desean tener la sartén por el mango siempre, eso
es lo que más me preocupa, un salvador acéfalo que ve televisión y consume todo
lo que le dicta el “nuevo marketing”, con personas que temen por sus vidas cada
día que aborda el transporte público, personas que tienen que pagar “renta” a
los angelitos de las maras… en fin un país perdido y sin rumbo. Necesitamos que
la nueva generación piense bien en qué van a convertir este pequeño país
siempre productivo a pesar de todo generamos pero no para nosotros sino para
que otros se hagan del dinero, hay que reinventar y construir un nuevo país así
diciéndonos las cosas que duelen no dándonos la mentira para no sacar nuestra
propia miseria… sino de nada sirve cantar en nuestro himno… “Saludemos a la
patria orgullosos y de hijos suyos podernos llamar…”
DIOS
BENDIGA A MI PATRIA
EL
SALVADOR.
Salvador Ezequiel Méndez
Twitter @ezek71