LA LECCIÓN DEL EQUIPO DE FÚTBOL QUE NO EXISTE
Al señor DAVID FAITELSON ahora después del vibrante partido que la selección de fútbol inexistente como nos llamó de El Salvador hizo con la de México que el tanto se ufanó de ser superior, le quedó la “cola entre las patas” con una sola lección LA HUMILDAD, en lo deportivo primó que no hay que despreciar a ningún adversario aunque existan los méritos suficientes para creer lo contrario, el respeto eso que tanto nuestros padres y familiares se han esforzado por enseñarnos quedó demostrado que el Señor Faitelson no ha tenido al menos ni siquiera para el protocolo en un medio de comunicación tan amplio y popular como para el que trabaja, ahora el desprecio que tanto sintió y demostró en lo deportivo le quedó como mantequilla en una sopa, se le diluyó en una lección de entrega y hombría de la oncena salvadoreña, a diferencia de sus despreciativos comentarios sólo le recomiendo que aprenda a respetar a sus contrincantes, a lo mejor aquellos despreciados y heridos en su amor propio se levantan de las cenizas y le enseñan a los menos humildes cómo conquistar el amor a su propia camiseta en el caso de un deporte como lo es el fútbol, ahora ya no necesitamos sus disculpas nos la ganamos en la cancha, nos disculpamos a nosotros mismos de sus desprecios y ofensas, y se la enviamos con el amor de 30,000 personas que animaron a la azul y blanco, aprenda a ser persona porque actúo como un homo sapiens sin educación, dejó que su hígado hablara en lugar de su cerebro, tal vez ahora aprenda a respetar incluso a aquellos que en el papel aparecen sin posibilidad alguna porque de un día a otro esa oportunidad llega como fue para nuestra selección de fútbol que finalmente la hizo realidad en éste histórico 6 de junio del 2009 en San Salvador.
Los que no tenían posibilidad alguna ante la evidente y real superioridad quedó totalmente destruida por el coraje de esos 11 inexistentes del fútbol que juegan en equipos como el Metapán, Vista Hermosa, Firpo, Fas, Águila, etc., y le descubrieron aquella máxima “que el que escupe hacia arriba le cae su propia escupida”, ahora sólo me resta decirle al Señor Faitelson con respeto del cual él no tuvo que si existimos y que ahora no debe de burlarse ni mofarse de los que juegan ante su amada selección, en una cancha son once contra once y cualquier cosa puede suceder, este gane que tanta alegría le ha traído a mi amado pueblo se la mereció aún más cuando el mencionado señor hizo esas desafortunadas palabras llenas de intolerancia y rencor, finalmente el número 100 del ranking de la FIFA le dio una lección de humildad a la número 26, miren que en el fútbol no hay lógica al menos fuimos más en la cancha que Irak, Emiratos Árabes Unidos, Tailandia, etc., hoy se dio el triunfo de el fútbol inexistente sobre la existencia de la estupidez humana. Sólo me resta dar las gracias a esos guerreros de la camiseta azul y blanco, la lograron hacer existir en el mapa del fútbol de CONCACAF.
Ezequiel Méndez
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