Las noticias también se
incardinan a una agenda ya sea política, religiosa o incluso política; no todo
lo que vemos de una agencia noticiosa es la verdad objetiva en el sentido más
cruda de la palabra, nos llega a nosotros con la ideología de quien la redacta
e incluso con ideas preconcebidas, por lo tanto las noticias que asumimos como
verdaderas a veces pueden ser tendenciosas e incluso malintencionadas.
Las noticias a veces reflejan un
lado del espectro cuando salen de lugares en conflicto: no es lo mismo que una
persona nativa del lugar redacte una noticia que otra que tiene otro
antecedente social y con ello sus prejuicios, sus ideas políticas e incluso de
la agencia noticiosa que cubre el evento.
¿Son confiables las noticias que
consumimos en nuestros medios sociales ya sean impresos o electrónicos? Si nos
vamos a las fuentes de las agencias noticiosas veremos que son ellos implícitamente
quienes generan la opinión noticiosa: Por ejemplo en los recientes ataques
violentos que se dieron en Francia a finales del año 2015 y los de Bélgica a
principios del año 2016 inundaron los medios noticiosos a nivel mundial, pero
ataques dentro de Irak o de Turquía ya no tienen el mismo atractivo por lo
tanto sus coberturas son menores y la importancia de generar opinión ya no lo
es como los que se dan en Europa.
Los dueños de los medios de
comunicación también tienen su propia agenda y con ello las noticias que le
sean favorables a ciertas instituciones que les patrocinan nunca tendrán el
impacto ni la importancia que cuando por ejemplo afecta a adversarios
ideológicos. Eso nos deja una politización noticiosa y también cuando los
países particularmente dominantes deseen inferir en la opinión pública para
desviar la atención a eventos que puedan ser negativos a los intereses de
dichos países.
¿Hay alguna ética en los medios
de comunicación contemporáneos? Las hay de forma relativa de acuerdo a los
patrones socialmente aceptados, las agencias de países árabes nunca se
atreverían a denunciar abusos de índole religioso al interior de sus países de
influencia, lo mismo corre por el lado occidental cuando sean noticias que
muestren las contradicciones o abusos de índole religioso de sus países de igual
manera serán tratados con poca cobertura porque en ambos casos el factor
religioso tiene la fuerza coercitiva suficiente para no solamente ignorar
eventos sino hasta desaparecerlos cuando sea el caso.
Los medios generan atención
social y por medio de generar opinión pública son en realidad quienes dominan
las esferas políticas, económicas y sociales. Cuando corporaciones bancarias
realizan acciones que afectan a amplios sectores sociales los medios se
silencian pero cuando éstos mismos hacen “labores sociales” lo medios son los
primeros en cubrir esos eventos. Así nadie muerde la mano que le da comida y
las agencias bancarias tienen una amplia partida en publicidad y para mantener
contentos a los medios de comunicación.
Los medios por hoy son responsables
de muchos eventos cuando les dan hiperpublicidad haciendo que éstos se
potencien en la conciencia colectiva hacia quienes van dirigidas, manejan y
generan opinión pública, esconden o atenúan noticias que les son desfavorables
a los dueños o sectores económicos afines a la ideología del medio y diluyen
todo aquello que pueda potencialmente ser negativo para los intereses de
sectores afines en materia política.
Así que cuando una noticia sea
demasiada importante pero quede la duda hay que asumir que `podría existir otro
lado del espectro, otra historia por ser igualmente contada, las noticias no
son profesiones de fe y se asumen en su totalidad sin el escrutinio de la íntima
convicción de quien la consume; hay que aprender abrirse a que no todo los que
nos dicen como noticias fueron tal y cual nos las contaron, hay que ser
críticos y aprender a asumir una actitud crítica con respecto a quién te la
cuenta o cómo te la cuentan, no todo los que nos dicen es así como quieren que
tu opinión se haga, existe un margen de propaganda y de panfleto en cada
noticia y eso es lo que hay que aprender a discernir en los medios de
comunicación contemporáneos.
SALVADOR EZEQUIEL MENDEZ
ANALISTA DE TEMAS CONTEMPORÁNEOS.
@ezek71 (twitter)
ezek71@gmail.com
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