La victoria del FMLN de las elecciones del 2 de febrero del
año 2014 puede ser un indicio de un aire triunfalista que lejos de favorecer
les hizo despertar a una derecha dormitada y golpeada ante la ilusión de la
primera elección, en la cual la izquierda pensando en obtener una aplastante
victoria sobre la derecha en realidad fue otro el resultado…
Primero la campaña prepotente del FMLN hizo que muchos se
concentraran en observar a “al faro que
ilumina a América como lo había dicho en el pasado el candidato Sánchez Cerén
(Venezuela)” lo que en su momento vino a restar no a sumar en la conciencia del
votante, aquel que se abstuvo en realidad terminó por sumarse al proceso
eleccionario, los números y el pueblo en realidad habló… aquellos que dijeron
que ARENA estaba en vías de desaparecer fue totalmente lo contrario, ambos
obtuvieron más de un millón cuatrocientos mil votos y los que habían dicho
futurísticamente que la derecha no se uniría en realidad se equivocaron; no
sólo se unieron sino que demostraron que El Salvador no les pertenece
totalmente a la izquierda que la derecha también existe y tiene poder, que para
gobernar necesita de su adversario y que ambas ahora deben de controlar sus
aires e ímpetu.
El candidato Quijano se mostró incendiario e hizo un
llamado violento en parte porque se conocen de muchos procesos fraudulentos los
cuales el Gobierno hábilmente calla porque le beneficia, esa reacción la misma
noche de las elecciones es un recordatorio que la derecha tiene poder y no la
pueden ignorar … esos aires prepotentes y triunfalistas de la izquierda los
tienen que hacer a un lado porque igual que en el 2009 ambas extremas deben de
coexistir para llevar el proyecto de nación en cara al futuro y a un proceso
cada vez más polarizado.
Esos 6540 votos de diferencia son en realidad una mínima
cantidad de cara a la gran cantidad de personas que fueron a votar, y eso lejos
de ayudar polariza más el panorama político, el FMLN en la primera elección
tuvieron un total de 1.305.462 votos los
cuales le dieron en esa elección un porcentaje de 48.93%, mientras que ARENA
obtuvo en esa misma elección 1.039.275 un porcentaje de 38.95% los cuales había
una diferencia de 266,187 que hizo que la izquierda se creyera la gran
vencedora y les elevó un ego demasiado inflado, ARENA estaba en realidad herida
porque UNIDAD de Antonio Saca había sacado un cúmulo de 305.294 para un porcentaje de 11.44% la cual
como era lógica sería la que en realidad definiría la segunda vuelta…
En esta segunda vuelta según los datos preliminares el FMLN
obtuvo 1.490.264 un aumento de 184,802 votos que podríamos decir surgieron de
personas que vieron en ellos la opción más viable, pero la derecha sí que es
espectacular su incremento 1.483.724 un aumento de 444,449 votos, cien mil
votos más que los que se proyectaban provenientes de UNIDAD, en realidad quien
no mida este dato es aún más difícil, el frente ahora tendrá a disminuir su
cúmulo de voto por el desgaste dentro del ejercicio del poder en los próximos 5
años y de los aciertos y desaciertos que la figura de Sánchez Cerén haga a la
política con sus vecinos y seguramente de la ALBA dependencia, un hombre que en
el pasado quemó banderas de EEUU tendrá que tener manos de ceda ya que ahí
residen más de 2 millones de compatriotas muchos de ellos ilegales y si no
maneja con cuidado su boca y su forma de ser tendremos seguramente reacciones
de éste país hacia su gobierno, teniendo en cuenta que representa a la
ortodoxia más radical y más pro Castro y Chavista dentro del FMLN, tanto en su
forma de ser política como en su modelo social, podríamos decir que a pesar de
ser una elección legitimada por su realidad hay mediciones que van más allá de
los números, muy parecido al caso Venezolano la elección de Capriles y Maduro
fue bastante similar, la victoria no fue amplia ni tampoco se ganó sin ignorar
la inmensa cantidad de personas que no apoyaron a Maduro en esa victoria; ahora
El Salvador tienen un panorama bastante parecido: “POLARIZACION EXTREMA y UNA
VICTORIA PÍRRICA” la cual no puede inferirse que el FMLN va a sonreir y decir ganamos,
ganamos, ganamos… Porque es una verdad pero por menos de un 0,11% lo cual nos
dice que estamos ante unas elecciones cerradas y polarizadas, si quieren seguir
deberán cambiar de estrategia y tener PRODUCTIVIDAD, no alentar el parasitismo
social, ni ofrecer populismo barato, entender que los que no le dieron sus
votos son SALVADOREÑOS Y SALVADOREÑAS no ganado vacuno ni borregos, los cuales
no creemos en su sistema político ni social, sino que somos hijos de una misma
patria, con diferentes ideas y diferentes realidades, aquí el insulto y la
burla no tienen un lugar, estas elecciones nos dejan el mensaje más sencillo de
todos… GANARON POR UNA CIFRA NO POR QUE EL PUEBLO EN UN NUMERO REPRESENTATIVO
LES CREA NI LES DE SU CONFIANZA.
Ahora a ver cómo se comportan con… ¿humildad o prepotencia…?,
eso dependerán de las línea que los Castro desde Cuba les den a la dirigencia
del FMLN, porque crean o no ellos son el poder detrás del trono de quien ahora
serán nuestro presidente y de ellos depende mucho de nuestros problemas
políticos.
Salvador
Ezequiel Méndez
Analista
político de temas salvadoreños.
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