Las elecciones del 2 de febrero del 2014 en El Salvador nos
dejan muchas lecciones importantes: Con un 53% de votantes ya confirmados de
nuevo el ausentismo hizo de las suyas, la razón es muy simple la oferta
electoral se centro en atacarse encarnizadamente, fanáticos de ambos bandos se
dedicaron a sacarse los trapos sucios y obvio tanta mala sangre se vio
reflejada en que un 47% de los posibles votantes prefirieron quedarse a ver
cómo otros menos desencantados ejercieron sus opciones políticas mediante el
voto, la fragmentación de la derecha que en un momento era atacada por ambos
partidos mayoritarios fue la que en muy en el fondo salió siendo el as del
poder que ambas fuerzas necesitan… las dos fuerzas mayoritarias conquistaron su
voto duro y sacaron más de un millón de votos cada una con la diferencia que la
primera fuerza de izquierda el FMLN tuvo una diferencia de 300,000+ votos los
cuales los hacen los virtuales ganadores y ser por ahora la mayor fuerza
política muy a pesar del desgaste que hacen que los gobiernos pierdan en su
momento todo el impulso inicial de casi 5 años de gobierno; en cambio la
derecha se observa bastante dispar la ahora segunda fuerza ARENA sacó sus votos
duros pero la fraccionada tercera fuerza de UNIDAD sacó sorprendentemente los
300,000+ que los separa del partido de izquierda, y con esto quedó claro que la
igualdad de ambas fuerza sigue aunque sea en otra institución de derecha, a
pesar de todo si sumamos ambos votos de derecha sigue estando por un 1% arriba
del total de la izquierda, lo que sucede es que el escenario ha cambiado, ARENA
si quiere al menos hacer un buen esfuerzo debe de menos de un mes convencer al
indeciso y al que castigó con su silencio que ellos pueden de alguna forma
cambiarse a sí mismos, que de verdad dejarán su clásica prepotencia que ahora
observamos del lado contrario: la izquierda confiada y prepotente se olvidan
que detrás de éste ejercicio democrático está el soberano o sea el pueblo que
una vez habló y dijo a pesar del pésimo candidato presentado por la izquierda y
de la pobre gestión gubernamental estamos confiando en ustedes para que la
derecha si quiere regresar tenga que dar un paso cualitativo no cuantitativo.
¿Quién ganará?... si la derecha no resuelve sus diferencias
se harán más daño que beneficio, no solamente le darán más fuerza a una
izquierda intolerante que le gusta recibir en su ego que son la “plus ultra”
pero igualmente tiene que revisarse y no cometer sus errores de siempre el
pueblo le perdonó llevar a un candidato realmente impopular (y hasta erróneo) y
a base de su fuerza electoral tenerlo a
unas elecciones de revalidar su poder político, la historia del mismo frente
los hace que tengan que revisarse porque muchas de sus medidas han coqueteado
con el “neoliberalismo” que tanto dicen atacar, hacer más y dejar la propaganda
a un lado y centrarse en lo que están haciendo perfilando una década que puede
ser la peor o la mejor eso solamente lo tiene la izquierda misma en sus manos,
abrir espacios a los nuevos liderazgos que muestran la modernidad que un “Nayib
Bukele” como muestra de lo que la política es: personas que a pesar de
representar una bandera con una historia bastante agitada pueden no sólo
superar las estupideces políticas de sí mismos y superar esas limitaciones ideológicas y luchas
intestinas que tanto fraccionó a la izquierda misma en el pasado, y hacer que es
lo que en nuestro país falta: pensar en esa inmensa masa de necesitados de
trabajos dignos y poder ser productivos en una sociedad convertida en una
parodia de sí misma, ambas fuerzas están más centradas en el poder que en la
solución real de los agobiantes problemas de la sociedad salvadoreña, ganará
aquel que piense en el “soberano” y le diga no es “demagogia” no solamente me
acuerdo de ti cuando necesito el voto, izquierda o derecha …¡qué va! Me importa
un bledo quien lo haga tan solo que lo haga bien… La delincuencia, las maras,
la extorsión, la poca productividad que ahora gozamos, la polarización fanática
que en lugar de abrir espacios los cierras en dicotomías ideológicas que
hábilmente manejan estos animales políticos que tenemos, ganará o el “status
quo” y lleven un presidente solamente para dejar las cosas como están, o ganará
aquellos que entiendan que la política es en suma una herramienta no medio para
que estas nuevas élites y castas se sirvan de ésta teta dorada llamada “estado”.
Si ARENA no se reinventa puede que se quede recordando
viejos tiempos de gloria en que el “soberano” le confió una presidencia ahora a
pocos días de mantenerse intacta o de sorpresas… no olvidemos que el pueblo no
es pendejo, si estas ratas políticas creen que a base de promesas dejarán las
cosas como siempre recuerden que somos un pueblo violento, peleonero y difícil
de someter, derecha o izquierda, hagan algo por el pueblo eso es lo que de verdad
deberían de pensar no en ganar unas elecciones, éstas se repetirán pero éstas
siempre abren la puerta para darle a cada quien lo que se merece…
Salvador Ezequiel Méndez
Analista Político exiliado del paraíso salvadoreño....
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