El resurgimiento de viejas ideas

LAS VENAS LATINOAMERICANAS RECARGADAS

Con el renovado resurgimiento de la popularidad del libro “Las venas abiertas de América Latina” el cual ha sido históricamente el libro de referencia política de los intelectuales de izquierda y con la popularidad que inusitadamente el presidente de Venezuela Hugo Chávez le dio al regalárselo al presidente Obama (en la V cumbre de las Américas celebrada en el 2009 en Trinidad y Tobago) ha renacido el debate que el libro promueve, escrito en la juventud del Señor Eduardo Galeano el cual en aquella época ejercía el periodismo, incluso tuvo en un momento que salir de su país Uruguay debido a que una Junta Cívico-Militar ocupó el poder instaurando una dictadura en la década de los 70s, muchos de forma intestina atacan el libro, pero hay que verlo en una dimensión diferente, para poder entenderlo las personas tienen que hacer a un lado sus prejuicios políticos, no creo que el libro sea un desperdicio todo lo contrario tiene hechos muy bien expuestos y puntos bien explicados: el problema nace de querer instaurarlo como una “Biblia” exenta de errores tanto de fondo como de forma; muchos ignorantes de la actualidad quieren despotricar contra el libro haciendo alarde de su miopía intelectual, el libro es una crónica histórica de los saqueos de parte de Europa en sus inicios y luego de Estados Unidos sufrida por Latinoamérica en su historia tanto política como social, el autor tuvo el valor y la firmeza de escribirlo en tiempos turbulentos en la cual América Latina estaba luchando intestinamente por sobrevivir a regimenes totalitarios por supuesto muchas veces avalados por la potencia Norteamericana.

En la percepción de aquella época la cual marcaba una fuerte dicotomía Izquierda-Derecha el libro era magistralmente contestatario y podríamos decir que exponía la ideología de izquierda de su entorno: los hechos que toca era por decirlo las llagas históricas que nadie había tenido la gallardía de exponer abiertamente, quizás el mayor mérito del libro fue hablar de la deuda histórica de las potencias que en su momento obtuvieron aprovechando la debilidad de Latinoamérica y es imposible negar que el saqueo del cual habla el libro no fue cierto, lo cual a mi criterio es el mayor mérito intelectual de la obra de Galeano, es por decirlo el fondo que él tocaba de forma tan magistral pero hay ciertas ideas de forma que tal vez estaban demasiada ideologizadas, las posibles soluciones eran por decirlo una incitación a la tan anhelada insurrección popular que quedó establecido como el evangelio de la izquierda de aquella época, señalar a los responsables históricos era excelente pero su divergencia más evidente con respecto a la realidad fue que promovía de una forma panfletaria ideas de una izquierda que todavía ahora navegan en el radicalismo más etéreo, el libro no tiene porque pagar en su totalidad por la falta de sustanciación ideológica, mas aún fue fiel a su entorno tanto ideológico como político de ahí su verdadero valor histórico, y que Chávez lo haya promovido le ha permitido volver a retomar fuerza editorial lo cual es impresionante debido a sus ya tres décadas de existencia. 

Ahora cuando todo el mundo parece envuelto en una discusión sobre la validez o no de los argumentos del libro hay que observar que Galeano estaba en su etapa juvenil y carecía de el conocimiento intelectual que talvez ahora pueda poseer, respondía a una corriente de una izquierda emergente que demandaba material intelectual para sustentar sus luchas revolucionarias en América Latina, el mundo inmerso en una guerra fría demandaba que sus dos exponentes intelectualmente justificaran sus “modos operandis” lo cual el libro hizo de forma magistral, y finalmente la izquierda de aquella época quería ideologizar a todos aquel que empezara a formarse un criterio social y político con lo que el libro fue una respuesta directa a dicha ideologización y por lo tanto fue una excelente forma de lograr captar la conciencia de una juventud contestaria y que sin dudarlo se lanzó a la guerra revolucionaria de aquellos tiempos, más allá de esos aspectos el libro seguirá siendo el libro de referencia de la izquierda Latinoamérica “ad eternum” porque reduce el mundo de una forma muy simplista la realidad tan compleja de Latinoamérica culpando y señalando para luego inyectar sus ideas revolucionarias, Galeano sin pensarlo escribió una “Biblia revolucionaria” la cual seguirá como lo que es un excelente libro que recopila de una forma ideologizada la realidad histórica de Latinoamérica. El libro no lo podemos encajar en bueno ni malo, hay que matizarlo y ponerlo en su contexto y sacarle el provecho como el lector decida, pero no podemos negar de su valor histórico, como crítica social y político que tuvo en su momento.

Ezequiel Méndez

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